La historia de Tapada do Chaves se remonta a principios del siglo XX, cuando la familia Chaves plantó los primeros viñedos en las laderas de la Serra de São Mamede en su pequeño terreno cubierto, iniciando una relación de pasión y dedicación a la tierra. Ubicada en la parroquia de Frangoneiro, en las afueras de Portalegre, la Tapada do Chaves existe desde hace más de un siglo y ha jugado un papel destacado en la creación de la región demarcada en Alentejo con sus vinos de origen protegido.
En Tapada do Chaves hay dos de las parcelas de vid más antiguas del Alentejo, en producción, con registros de 1901 para la vid roja y de 1903 para la vid blanca.
Con 60 hectáreas de terreno y 32 de patrimonio vitivinícola, la tapada está situada sobre un macizo granítico y a una altitud generosa, en una zona fuertemente influenciada por la orografía y la cubierta agroforestal, en un microclima determinante para la calidad y tipicidad de la vinos producidos allí. . Es un lugar único por su patrimonio y potencial.